Existen variados centros de recepción de ayuda, entre la cual urge priorizar a los pequeños (pañales desechables, ropa y juguetes en buen estado).
Recomendamos canalizar la ayuda mediante los sindicatos y federaciones estudiantiles.
A los grandes patrones, que hasta este momento guardan silencio, que asuman su responsabilidad económica y social. Sus fortunas –en parte esencial- las han acumulado extrayéndolas desde el esfuerzo de trabajadores y trabajadoras.